Nube de acontecimientos, párpados cerrados, manos frías, corazón caliente.
Inimaginables sonidos bajo la luz, tenue, de un día lluvia, tintineo de gotas de sueños invisibles, alma pura y puro antojo a la vida. Rostro pálido, mirada perdida. Mirada perdida al suelo mojado.
Paso tras paso, respiración profunda, fuertes latidos interminables de sentimientos duros y sarcásticos en este corazón de mimbre, lleno de marchitas flores y pochas frutas.